Hay un problema aquí, o más de uno.
En primer lugar, falta de diálogo claro en las relaciones entre sexos:
Mannaz escribió: Si un chico quiere sexo ese día sin falta, la forma segura es esa. La novia, conocida, amiga.etc puede querer o no
Creo que se debería hablar en pareja y decirlo claro: "Quiero sexo hoy, contigo o con una prostituta" Tendrá sexo seguro, pero la novia o amiga tendrá clara su relación con él.
Mannaz escribió:te pongo otro motivo por los que los hombres dicen acudir a los servicios de estas señoritas: porque con ellas pueden hacer cosas que con sus novias o mujeres no harían, porque ellas no les gusta o porque ellas no son prostitutas y no estaría bien que lo hiciese.
Aquí el problema que veo es educación sexual, quizás tabúes que habría que analizar, falta de información en suma. Yo pensaba que los trabajos de Masters y Johnson ya estaban admitidos.
En relación a lo caro que sale "llevarse al huerto" a una joven, podía empezar por decirle a la chica que quiere tener sexo al final del día, así los dos saben a qué atenerse. Además, ya es hora de tener relaciones de igualdad. Si salen juntos a cenar pagan la cena a medias, y demás gastos, cine, etc, a medias. Si ambos quieren sexo, los dos disfrutan y pagan por igual. Esto es una cuestión de educación y de librarnos del rol macho de dominante que paga y espera sexo a cambio. A parte de lo limitado de una relación entre dos personas que empieza y acaba en un revolcón.
Peterpan escribió:Eso es cierto, ya he conocido compañeros de trabajo que pensaban así y es por la pereza de conquistar a una chica. Esto pasa porque muchos jóvenes les va la vida fácil y sin problemas, ya he debatido con ellos este tema.
¿Y les da lo mismo que la prostituta tenga con ellos una relación sexual no deseada? ¿Pueden estar haciéndole el amor a una mujer que está pensando "A ver si acaba este tío"? O por aún, una esclava sexual forzada a ejercer la prostitución
Al respecto he encontrado un reportaje en El País más documentado, creo que merece la pena leerlo. Pongo solamente el comienzo y subrayo un par de frases.
Para leerlo completo aquí:
http://www.elpais.com/articulo/sociedad ... isoc_1/Tes
Sin tabúes. Sin estigmas. ¿Sin consideración? El acercamiento a la prostitución por parte de las nuevas generaciones -mujeres incluidas- resulta algo socialmente aceptado: son muchas las despedidas de soltero que terminan en un club o con compañía de pago. La oferta, inconmensurable en la última década debido a la explotación sexual de la inmigración -se calcula que hay unas 300.000 prostitutas ejerciendo en España-, es vista como una opción de ocio por los jóvenes, que, sin reparar en la trastienda del negocio, a menudo en manos de mafias, están contribuyendo a que el perfil del cliente se transforme: hoy tiene en torno a los 30 años de media, según algunas fuentes. El comercio del sexo sigue en el limbo: no es ilegal, pero tampoco legal. Un vacío pasto de abusos sobre el que se precipitan cada vez más jóvenes.
La cultura de la inmediatez, la voluntad de obtener de forma rápida y sin esfuerzo el sexo sin compromiso han sido factores clave para este cambio de perfil en una generación que, paradójicamente, ha nacido después de la revolución sexual.
"Ligar cuesta mucho trabajo y además no tienes ninguna garantía de éxito. Debes darle charleta a una tía durante horas, decirle cosas que a ella le gusten, de esas románticas; invitarla a cenar o a tomar copas y después a lo peor te quedas con las ganas, porque puede decirte que no. O te dice que sí para ennoviarte. Así que vamos al puticlub, pagamos y ya está. Es mucho más sencillo. Como irse de vacaciones a Cuba: allí, por unos pintalabios o un par de medias, tienes todo el sexo que quieres. Y sin complicaciones".
Rafa tiene menos de 30 años, estudios universitarios y las ideas muy claras: para qué "complicarse la vida" si por 50 euros puede disfrutar de un servicio completo en un club. Quién y en qué circunstancias viva la mujer que se lo preste, no le preocupa en absoluto...

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Un abrazo