NO ME OLVIDES. HISTORIA DE LA MASONERÍA
Publicado: Mié May 09, 2007 9:43 am
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HE AQUÍ UNA HISTORIA INTERESANTE QUE PRESENTÉ EN MI LOGIA "UNIÓN Y PROGRESO No. 5 E HIJOS DEL PORVENIR"
El Simbolismo Masónico, lo sabemos perfectamente, proviene de la más remota antigüedad. Tan es así, que es frecuente escuchar la frase “se pierde en la noche de los tiempos”. Sin embargo, la Francmasonería es tan hermosa y adaptable, que de vez en cuando, surgen nuevos símbolos que vienen a enriquecer el acervo de nuestra institución. He aquí una bella historia.
En 1933, un oscuro y mediocre pintor austriaco, subió al poder político de Alemania. Se llamaba Adolph Hitler. Sus ideales bastante discutibles, así como sus métodos demasiado criticables, pronto hicieron mella en la sociedad alemana. Entre los grupos más perseguidos durante el nazismo, la Francmasonería no podía quedar descartada. Para 1934, la Gran Logia del Sol, una de las más importantes entonces de Alemania de la pre-guerra, ubicada en la localidad de Bayreuth, se sintió en peligro. Utilizar en la solapa un prendedor con la escuadra y el compás masónicos, era un suicidio: de hecho, los antecedentes y la influencia hebrea en la institución condenaban a la Masonería. ¿Cómo podían los Hermanos alemanes reconocerse entre sí en una sociedad cada vez más polarizada y dominada por un discípulo de la Orden de Thule?
Fue entonces cuando la Gran Logia del Sol ideó cambiar el prendedor de la escuadra y el compás por una flor en el ojal de la solapa: la Flor azul “No Me Olvides”(en alemán, das Vergissmeinnicht), que se volvió en símbolo de reconocimiento entre los Hermanos Masones de Alemania, en tanto las huestes de la SS y la SA se dedicaban a confiscar las propiedades de las Logias. De esta manera la Masonería se ocultó y esta delicada flor asumió el papel del símbolo de una Masonería que sobreviviría durante el reinado de la oscuridad.
Durante la etapa del poder Nazi, la flor "No Me Olvides", utilizada en la solapa, sirvió como método mediante el cual los Hermanos podían identificarse el uno al otro en público, tanto en las ciudades como en los campos de concentración a través de Europa. "No Me Olvides" distinguió las señales de incontables Hermanos que se rehusaron a permitir que la luz simbólica de la Masonería se extinguiera por completo.
Al término de la guerra (1945), la Francmasonería, de forma paulatina, reabrió sus puertas, recuperando gran parte de sus propiedades materiales y su antiguo esplendor. En 1947, siendo Gran Maestre de la Gran Logia del Sol el V H Beyer, se adoptó oficialmente un pequeño prendedor con la figura de esta flor como el emblema de esa primera convención de Hermanos sobrevivientes de la oscuridad para hacer brillar de nuevo la Luz Masónica
En la primera Convención Anual de la Gran Logia Unida de Alemania de Antiguos, Libres y Aceptados Masones en 1948, el prendedor fue adoptado como un emblema Masónico oficial en recuerdo de los miles de valientes Hermanos que realizaron su trabajo Masónico bajo las condiciones más adversas. Al año siguiente, cada delegado a la Conferencia de Grandes Maestros en Washington D.C., recibió uno de parte del Dr. Theodor Vogel, Gran Maestro de la GLUA.
De esta manera un simple botón de flor transformado en un símbolo de fraternidad, se convirtió en el más usado entre los Masones de Alemania y entregado con ceremonia a los nuevos Masones en la mayoría de las Grandes Logias de América y Canadá. En los años siguientes su significado ha sido atestiguado a nivel mundial por los miles de Hermanos que ahora lo usan con especial orgullo. Por ello, cuando véais una flor NO ME OLVIDES, jamás olvidéis a los Hermanos perseguidos por la intolerancia y el fanatismo humanos.
HE AQUÍ UNA HISTORIA INTERESANTE QUE PRESENTÉ EN MI LOGIA "UNIÓN Y PROGRESO No. 5 E HIJOS DEL PORVENIR"
El Simbolismo Masónico, lo sabemos perfectamente, proviene de la más remota antigüedad. Tan es así, que es frecuente escuchar la frase “se pierde en la noche de los tiempos”. Sin embargo, la Francmasonería es tan hermosa y adaptable, que de vez en cuando, surgen nuevos símbolos que vienen a enriquecer el acervo de nuestra institución. He aquí una bella historia.
En 1933, un oscuro y mediocre pintor austriaco, subió al poder político de Alemania. Se llamaba Adolph Hitler. Sus ideales bastante discutibles, así como sus métodos demasiado criticables, pronto hicieron mella en la sociedad alemana. Entre los grupos más perseguidos durante el nazismo, la Francmasonería no podía quedar descartada. Para 1934, la Gran Logia del Sol, una de las más importantes entonces de Alemania de la pre-guerra, ubicada en la localidad de Bayreuth, se sintió en peligro. Utilizar en la solapa un prendedor con la escuadra y el compás masónicos, era un suicidio: de hecho, los antecedentes y la influencia hebrea en la institución condenaban a la Masonería. ¿Cómo podían los Hermanos alemanes reconocerse entre sí en una sociedad cada vez más polarizada y dominada por un discípulo de la Orden de Thule?
Fue entonces cuando la Gran Logia del Sol ideó cambiar el prendedor de la escuadra y el compás por una flor en el ojal de la solapa: la Flor azul “No Me Olvides”(en alemán, das Vergissmeinnicht), que se volvió en símbolo de reconocimiento entre los Hermanos Masones de Alemania, en tanto las huestes de la SS y la SA se dedicaban a confiscar las propiedades de las Logias. De esta manera la Masonería se ocultó y esta delicada flor asumió el papel del símbolo de una Masonería que sobreviviría durante el reinado de la oscuridad.
Durante la etapa del poder Nazi, la flor "No Me Olvides", utilizada en la solapa, sirvió como método mediante el cual los Hermanos podían identificarse el uno al otro en público, tanto en las ciudades como en los campos de concentración a través de Europa. "No Me Olvides" distinguió las señales de incontables Hermanos que se rehusaron a permitir que la luz simbólica de la Masonería se extinguiera por completo.
Al término de la guerra (1945), la Francmasonería, de forma paulatina, reabrió sus puertas, recuperando gran parte de sus propiedades materiales y su antiguo esplendor. En 1947, siendo Gran Maestre de la Gran Logia del Sol el V H Beyer, se adoptó oficialmente un pequeño prendedor con la figura de esta flor como el emblema de esa primera convención de Hermanos sobrevivientes de la oscuridad para hacer brillar de nuevo la Luz Masónica
En la primera Convención Anual de la Gran Logia Unida de Alemania de Antiguos, Libres y Aceptados Masones en 1948, el prendedor fue adoptado como un emblema Masónico oficial en recuerdo de los miles de valientes Hermanos que realizaron su trabajo Masónico bajo las condiciones más adversas. Al año siguiente, cada delegado a la Conferencia de Grandes Maestros en Washington D.C., recibió uno de parte del Dr. Theodor Vogel, Gran Maestro de la GLUA.
De esta manera un simple botón de flor transformado en un símbolo de fraternidad, se convirtió en el más usado entre los Masones de Alemania y entregado con ceremonia a los nuevos Masones en la mayoría de las Grandes Logias de América y Canadá. En los años siguientes su significado ha sido atestiguado a nivel mundial por los miles de Hermanos que ahora lo usan con especial orgullo. Por ello, cuando véais una flor NO ME OLVIDES, jamás olvidéis a los Hermanos perseguidos por la intolerancia y el fanatismo humanos.